viernes, 8 de octubre de 2010

Vida Nueva - Capítulo 6

CAPÍTULO 6


Alvar salió del taxi. Estaba enfrente de un edificio bastante grande, con banderas patrióticas que ondeaban al son del viento.

Entró en el edificio y fue directo a Información. Una guapa señorita estaba atareada atendiendo al teléfono. Estuvo esperando hasta que terminase, momento en el que se acercó hasta el mostrador.

-          ¿Qué deseaba? – preguntó la mujer.
-          Me gustaría pedir permiso para acceder a los archivos de asesinos en serie más recientes

-          ¿Tiene algún motivo que justifique dicho acceso? Como puede comprender, no dejamos que cualquiera consulte nuestros archivos.

-          Por supuesto. Soy Alvar Ramírez, abogado. Llevo el caso FSD-42 y necesito el acceso a dicho archivo.

-          Déjeme consultarlo un momento.

Se metió en su ordenador y tras unos cuantos tecleos se volvió hacia él y le dijo:

-          Todo en orden. Vaya al segundo piso y el en primer pasillo a mano izquierda verá una puerta que pone “Archivos”. Pregunte al que esté allí y él le dirá lo que tiene que hacer.

-          Muchas gracias.

Siguió todas sus órdenes y apareció frente a la puerta que le había mencionado. Una policía le estaba esperando fuera.

-          ¿El señor Alvar Ramírez? – preguntó.
-          Ese soy yo
-          Soy la inspectora Inés Castro, acompáñeme si es tan amable.

La siguió a través de la puerta hasta una habitación en la que había una pantalla gigante.

-          ¿Que trata de encontrar? – preguntó la inspectora.

Se sacó del bolsillo la foto en la que figuraba el extraño tatuaje.

-          Busco un asesino en serie que utilice este símbolo para marcar a sus víctimas – dijo mientras la entregaba la foto – Un hombre ha muerto asesinado y la única pista que tenemos es este tatuaje tan extraño. Me gustaría comprobar si existe algún asesino que lo utilice.

La mujer lo estuvo observando durante un tiempo y al final respondió:

-          No estoy segura de haber visto este símbolo antes, pero si insistes en buscar yo te ayudaré.

-          Muchas gracias.

Abrió un programa que Alvar supuso que tendría todos los datos sobre los criminales que han pasado a manos de la justicia y de los que estaban en paradero desconocido. Escaneó la foto y con un programa de edición dejó únicamente el tatuaje.

Lo envió al programa y se conectó a la red principal de datos.

-          Tardará unos cinco minutos buscar entre toda la información disponible
-          Que poco tiempo, ¿no? Mi Internet no creo que sea tan rápido
-          A diferencia del resto de la gente, nosotros tenemos nuestra propia red, mucho mas fiable y segura, a la par que mucho mas rápida de lo que puedas imaginar.

La búsqueda se llegaba por el cincuenta por ciento y no mostraba ningún resultado todavía. Empezaba a desesperarse y a sentir que estaba equivocado.

-          Al final va a resultar que mis sospechas no estaban en lo cierto – comentó.
-          Espérese, todavía no ha terminado… ¡mire! ¡Ahí tiene una coincidencia!
-          ¡Menos mal! Pensaba que iba a haber venido en vano… ¡otra mas!
-          La búsqueda se ha completado, miremos los resultados a ver si se parecen

Abrió dos imágenes. Estaban vinculadas al perfil de un asesino, con todos los datos posibles incluido su estado actual.

-          El primero no me sirve, el símbolo no se parece en mucho y encima está entre rejas.
-          Cierto, probemos con el segundo…

Abrió el segundo resultado y creyó estar al borde del colapso.

-          Tampoco es este, no se parece en nada…
-          Estas cosas ocurren a veces. Quizá el tatuaje se lo hizo él mismo por algún motivo.
-          Es posible, pero eso no me lleva a ninguna parte. Probaré con la segunda idea que tenía pensada. ¿Puedes comprobar si ese tatuaje es el emblema de alguna secta?

-          Por supuesto, ahora mismo lo miro.

Volvió a enviar la imagen pero en esta ocasión en busca de sectas.

-          Esto no tardará nada
-          Cierto, ya finalizó la búsqueda – y añadió con voz apagada – sin resultados de nuevo…

No podía creer lo que estaba viendo. Las dos teorías que tenía se habían esfumado en un par de clicks de un ratón. No podía ser un asesino en serie lo que buscaba y tampoco pertenecía a una secta. Se llevó las manos a la cabeza. Ya no sabía que hacer. Con un atisbo de esperanza preguntó a la inspectora:

-          ¿Cuanto margen de fiabilidad tiene este programa?
-          Si cree que ha podido equivocarse un programa que utiliza la base de datos de la INTERPOL con una eficiencia del 98% entonces…

-          Vale, vale, me hago a la idea – respondió resignado.

La última esperanza que tenía se había esfumado tan o mas rápido que las anteriores. Se levantó de su silla y agradeció su ayuda a la inspectora

-          Ha sido un placer – añadió ésta – si puedo ayudarle en algo más no dude en pedírmelo

-          No, por el momento está bien, gracias de todos modos.

Se dirigió hacia la puerta cabizbajo, ahora tendría que empezar de nuevo desde cero.

Llegó al hall y vio de nuevo a la señorita de información.”Qué lástima que a pesar de que me hayan intentado ayudar no hayan conseguido nada” pensó.

Volvió a barajar de nuevo diversas teorías. “Solo me queda la posibilidad de que haya sido un asesinato por envidia o venganza, aunque todavía no se han encontrado signos de violencia. Y esa mancha morada y ese extraño componente en la sangre…”

Se disponía a salir de nuevo a la calle meditando, pero no tuvo tiempo para pensar en nada más. De repente un hombre moribundo abrió estrepitosamente la puerta irrumpiendo en el hall.

-          ¡Ayúdenme! ¡Nos han atacado a mi mujer y a mí en el bosque!

Se formó un revuelo impresionante alrededor suyo

-          ¿Dónde ha dicho? – preguntó raudo Alvar.
-          ¿Puede dar mas detalles del suceso? – le urgió un policía al lado suyo.
-          En el bosque… mi mujer… yo…

Y cayó desplomado. Había muerto. Se sentía tan impotente en esa situación que no podía hacer nada…

Pero un detalle llamó fugazmente su atención. En su brazo, visible por un corte en la camisa se podía ver una costra roja con un aura color morado a su alrededor…

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