Vaux le Vicomte en "El Hombre de la Máscara de Hierro"

Salida de Luis XIV (Leonardo di Caprio) a los jardines de Vaux-le-Vicomte

Pocos jardines existen que me emocione ver, probablemente debido a que el de mi comunidad es bastante cutre y está apartado como si fuera un pegote acoplado al conjunto.
Sin embargo existe la excepción a la norma, que en este caso son los jardines del palacio Vaux-le-Vicomte

La mayor parte del mérito de que me interese por una superficie verde con ciertos toques azulados tiene mucho que ver con las clases de los profesores Sara Pérez Barreiro y Ramón Rodriguez Llera, de la Escuela de Arquitectura de Valladolid. Ellos hicieron que mi predilección por este jardín de apariencia tan simple pero sin embargo tan magistral lo situase por encima del tan famoso y aclamado Versalles (que también es precioso). Por eso ayer, tras ver la película "El Hombre de la Máscara de Hierro" de 1998 (la que sale di Caprio, vamos) se me ocurrió dedicarle un espacio a modo de tributo

Un poco de historia

Allá por el Siglo XVII, a un tal Nicolás Fouquet, ministro de finanzas del Rey Luis XIV se le ocurrió la maravillosa idea de construirse una chabolilla sin demasiada importancia, total, le sobraba la pasta... Por ello contrató a los mejores artistas de aquella época: Le Vau, Le Brum y Le Nôtre, para que se encargaran de la ejecución. Le Vau diseñó el Palacio, le Brum puso la nota de decoración en los interiores y Le Nôtre aporto su granito de arena en la transformación paisajística

Vista frontal del palacio según como aparece en la película

El propio rey se hospedó en él prendado de su belleza y no fue hasta una gran fiesta en su honor que celebró el ministro con un amplio programa de festejos que esa admiración se tornase en envidia. ¿¡Cómo iba un ministro a tener una residencia mejor que la suya!? ¡Inadmisible! Poco tiempo pasó para que Fouquet fuese destituido y apresado con la excusa de que tanto dinero solo podía haber salido de una malversación de fondos

Así fue como el palacio fue precintado y se vendieron piezas de su mobiliario (algunas de ellas adquiridas por el propio Luis XIV) Además de eso, el Rey ordenó a los artistas que trabajaron en el palacio la creación del conocido por todos Versalles, con la condición de que fuera más grande y más bello que Vaux-le-Vicomte

Plano de los jardines que muestra también los desniveles del terreno creados

Verde y Azul

En la magnífica planificación de André Le Nôtre encontramos un amplio eje visual que actúa en cierto modo de eje simétrico de composición. Debido a las intervenciones que se llevaron a cabo en el terreno se genera una sensación de infinitud, potenciada obviamente por la gigantesca longitud del recorrido. Según salimos del castillo podemos observar cómo un camino inmenso se abre ante nosotros con una serie de parterres y fuentes que juegan con nuestra percepción visual. A nuestros ojos podremos creer que los parterres son iguales o que las fuentes laterales son circulares, pero como se puede ver en el plano ni los parterres son del mismo tamaño ni las fuentes son circulares (son en realidad ovales)

Podemos observar un recorrido visual totalmente lineal, pero sin embargo el recorrido real no es ni mucho menos recto, obligándonos a rodear fuentes e incluso a bordear el gran canal que atraviesa el recorrido (aunque se puede también cruzar en barca)

Al final del todo se halla colocado un hito en forma de una gigantesca estatua de Hércules subido en una peana. Es tan enorme que se puede distinguir ligeramente desde el propio palacio, pero sin embargo no se muestra en la película. La escena final se rueda en el lugar que se supone debería estar pero no podemos encontrarla, estando en su lugar "otra cosa" que no desvelaré para no estropear el final a nadie

Piedra y lujo: el interior del Palacio

Por desgracia no he estado allí personalmente, así que no puedo saber a ciencia cierta cuánto de lo que nos muestran en la película es real y cuánto son exigencias del guión. No sabría decir qué cosas pertenecen realmente al castillo y cuales son meros decorados. La única estancia que puedo asegurar que pertenece al castillo es el gran salón oval, comunicado directamente con el jardín. Poco se puede ver en la película pero al menos sí que se puede distinguir claramente por la forma que posee

El resto de localizaciones no soy capaz de discernir si son reales, decorados o de otras localizaciones. La película nos muestra distintas habitaciones, tales como los aposentos de Luis XIV, un salón de baile, halls inmensos o un salón-comedor. También hay partes que dicen a gritos que no están rodadas en Vaux-le-Vicomte, como unos subterráneos con una salida fluvial a algún tipo de río o canal o una habitación con el plano del palacio, que no coincide con Vaux

Podemos observar una decoración barroca francesa exquisita, candelabros y lámparas de araña iluminando las estancias y muros cubiertos de cuadros y pinturas. La película además nos muestra una serie de pasadizos secretos entre habitaciones, que si bien es cierto que puedan existir (en aquella época se utilizaban mucho como medida de seguridad) dudo que sean tantos como muestra la película, que da la sensación de poder acceder a cualquier estancia siguiendo una linea recta por todo el palacio mediante los pasadizos

Para terminar, debo decir que la película en sí guarda muchas incoherencias históricas, el hecho más significativo es que Luis XIV nunca vivió en Vaux-le-Vicomte ni fue considerado tan buen rey como sentencia el final de la película, la muerte de ciertos personajes no es la que nos muestra, D'Artagnan no fue amante de la reina madre y muchas más que se me escapan porque tampoco es que sea un erudito en estos temas

Existen más películas que utilizan Vaux-le-Vicomte como localización para algunas escenas, entre ellas Moonraker (James Bond), pero ninguna que lo retrate como esta película, en la mayor parte de su extensión, y captando toda la belleza que desprende y que enamora a simple vista